La Herejía Confirmada: El Papa Leo XIV Ratifica a un Obispo Pro-ordenación Femenina en St. Gallen
- jacquespintor
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“La esencia del periodismo es dramática. El periodista auténtico oculta lo suyo y revela lo ajeno; reúne en sí las vibraciones dispersas y las transmite; semejante al cómico, desaparece bajo la realidad que nos transfiere.” RAFAEL BARRETT
EXECUTIVE SUMMARY IN ENGLISH (El artículo en español sigue a este resumen en lengua inglesa)
Pope Leo XIV Confirms Pro-Women’s Ordination Priest as Bishop of St. Gallen: A Case of Doctrinal Complicity
On May 22, 2025, Pope Leo XIV confirmed the election of Fr. Beat Grögli as the new bishop of the Diocese of St. Gallen, Switzerland. Grögli, currently the parish priest of the St. Gallen Cathedral, is an outspoken advocate for the ordination of women and for radical reinterpretations of Catholic teaching on sexuality, marriage, and liturgy. During a press conference, he reiterated: "The women’s priesthood will come."(Wailzer, 2025)
His election took place under the provisions of the 1845 Concordat between the Holy See and the Swiss cantonal Church structure, which allows the cathedral chapter to elect the bishop, subject to papal confirmation. Contrary to some claims, however, the Pope is not bound to accept the chosen candidate. Canon Law (CIC 377 §1) makes clear that the Pope freely appoints or confirms bishops, and the Holy See has, in the past, rejected candidates.
Grögli’s record includes liturgical abuse—such as allowing women to read the Gospel and preach during Mass—and symbolic gestures that many interpret as mocking the priesthood. His ordination as bishop is scheduled for July 5, 2025.
The Diocese of St. Gallen is notorious for hosting the so-called “St. Gallen Mafia,” a network of progressive clerics who opposed Cardinal Ratzinger’s election and helped promote Jorge Bergoglio to the papacy in 2013. Grögli was ordained by Bishop Ivo Fürer, a central figure in that group.
The confirmation by Pope Leo XIV thus raises serious theological and ecclesial concerns, suggesting complicity—or at least tolerance—of positions long considered heterodox. It also challenges Leo XIV’s own credibility as a reforming pope committed to doctrinal clarity.
Wailzer, A. (2025, May 23). Pope Leo XIV confirms priest who supports ‘women’s ordination’ as new bishop of St. Gallen, Switzerland. LifeSiteNews. https://www.lifesitenews.com/news/pope-leo-xiv-confirms-priest-who-supports-womens-ordination-as-new-bishop-of-st-gallen-switzerland/
El papa Leo XIV ha confirmado como nuevo obispo de St. Gallen al sacerdote suizo Beat Grögli, conocido por sus declaraciones públicas a favor de la ordenación sacerdotal de mujeres y su apoyo a bendiciones homosexuales. La elección —realizada bajo el Concordato de 1845 que rige en algunas diócesis suizas— ha sido ratificada por Roma, pese a las posturas abiertamente contrarias a la doctrina católica que sostiene el candidato. En este análisis, revisamos el contexto histórico de la diócesis, el alcance real del Concordato, y la responsabilidad directa que implica la confirmación papal.
Buena lectura.
Jacques Pintor
ESTE ARTÍCULO SE PUBLICA POR PRIMERA VEZ EL 24 DE MAYO DE 2025.
EN ESTA ENTRADA:
1. Acusaciones de encubrimiento de abusos sexuales y de mala gestión eclesiástica
2. Una elección contaminada: el Concordato de 1845 y la falsa excusa de la pasividad papal
3. Un hereje confeso como pastor: la doctrina traicionada
4. Una diócesis corrompida: la herencia de la mafia de St. Gallen
5. Confirmación papal: acto administrativo o complicidad moral
6. Conclusión: ¿lux in tenebris… o tenebrae in luce
Acusaciones de encubrimiento de abusos sexuales y de mala gestión eclesiástica.
El nombramiento de Beat Grögli como nuevo obispo de St. Gallen, confirmado por el papa Leo XIV el 22 de mayo, es algo más que una simple designación episcopal. Se trata de una verdadera declaración de intenciones. Y no precisamente buenas.
Una elección contaminada: el Concordato de 1845 y la falsa excusa de la pasividad papal
En respuesta a un artículo del portal Lifesitenews.com enlazado más abajo, un lector objetó que el Papa no eligió a Grögli, recordando que la diócesis de St. Gallen está sujeta al Concordato de 1845, el cual permite a su cabildo catedralicio elegir al obispo local. Según esta interpretación, el Papa solo puede confirmar o rechazar al elegido, y en la práctica, estaría obligado a aceptar al finalista.
Esto es históricamente cierto en parte, pero canónicamente falso en lo esencial.
La realidad es que el Concordato regula el proceso de elección, pero no impone al Papa la obligación de confirmar a un candidato que contradice la fe católica. Como dejó claro el caso del obispo Wolfgang Haas en 1988, Roma puede rechazar a un elegido y ha ejercido esa prerrogativa en el pasado. El Código de Derecho Canónico establece (c. 377 §1):
"Corresponde al Sumo Pontífice nombrar libremente a los Obispos o confirmar a los que hayan sido legítimamente elegidos."
Por tanto, afirmar que el Papa “no lo eligió” es una forma engañosa de exonerarlo de su responsabilidad: un obispo no es legítimo hasta que el Papa lo confirma. Leo XIV podía haber dicho que no, pero no lo hizo. Y por ello, es plenamente responsable.
Un hereje confeso como pastor: la doctrina traicionada
Beat Grögli, hasta ahora párroco de la catedral de St. Gallen, ha dejado clara su visión eclesial:
“El sacerdocio femenino llegará”.
Apoya la reinterpretación de la moral sexual y matrimonial.
Ha promovido “bendiciones” a uniones homosexuales.
Ha permitido predicaciones litúrgicas por mujeres durante la misa —contraviniendo Redemptionis Sacramentum n. 64–66— y se ha burlado del orden sagrado celebrando con un sombrero de bufón.
Estas posturas están en abierta contradicción con la doctrina de la Iglesia. La enseñanza sobre el sacerdocio reservado a varones fue definida de modo definitivo por san Juan Pablo II en Ordinatio Sacerdotalis (1994):
“Declaro que la Iglesia no tiene en modo alguno la facultad de conferir la ordenación sacerdotal a las mujeres y que esta sentencia debe ser tenida en forma definitiva por todos los fieles de la Iglesia.” (n. 4)
La confirmación de Grögli fue reportada el 23 de mayo por LifeSiteNews, que detalló sus declaraciones públicas, acciones litúrgicas y antecedentes ideológicos:
“The women’s priesthood will come,” Grögli said, reaffirming during a press conference his belief in the inevitability of female ordination, despite its contradiction with definitive Catholic teaching (Wailzer, 2025).
Aceptar a un obispo que niega esto equivale a minar el depósito de la fe desde su misma raíz sacramental.
Una diócesis corrompida: la herencia de la mafia de St. Gallen
La diócesis de St. Gallen no es cualquier diócesis. Es el epicentro histórico del disenso clerical moderno. Entre 1995 y 2006 fue el lugar de reunión de la autodenominada “Mafia de St. Gallen”, un grupo de obispos y cardenales que se oponían al entonces cardenal Ratzinger y promovieron activamente la elección de Jorge Mario Bergoglio.
El anfitrión de aquel grupo, el obispo Ivo Fürer, fue quien ordenó sacerdote a Grögli. Su sucesor, Markus Büchel —quien ha sido administrador hasta ahora—, también ha promovido ideas contrarias al magisterio y pidió en 2013 que los sacerdotes homosexuales “salieran del armario”.
Bajo su dirección, la Conferencia Episcopal Suiza solicitó a un activista LGBT, el Dr. Arnd Bünker, la redacción del informe para el Sínodo sobre la Familia de 2015, proponiendo aberraciones como la comunión para divorciados “vueltos a casar” civilmente.
Confirmación papal: acto administrativo o complicidad moral
¿Puede el Papa confirmar a un hereje sin ser cómplice de la herejía? Según el canon 1321 §2, la ignorancia de la ilicitud de un acto no exime automáticamente de responsabilidad canónica si esta se presume vencible. Y en este caso, la herejía de Grögli era notoria, pública y documentada.
El Papa Leo XIV no puede escudarse en la letra del Concordato. No es prisionero de un tratado decimonónico, sino custodio de la fe apostólica. Confirmar a un pastor así, conociendo sus declaraciones y prácticas, es una traición al Evangelio.
Conclusión: ¿lux in tenebris… o tenebrae in luce?
Leo XIV fue elegido con el lema Lux in tenebris —luz en las tinieblas—. Pero con esta confirmación, se enciende una nueva alarma: la luz que promete puede estar siendo usada para iluminar el error, no para combatirlo.
Mientras la Iglesia sufre por la confusión doctrinal, la pérdida de fieles y la tibieza moral, Roma no puede permitirse seguir cerrando los ojos ante la herejía institucionalizada. La confirmación de Grögli no es un hecho menor: es un síntoma de que la enfermedad del relativismo sigue viva y protegida en los más altos niveles.
Nota editorial:
Aunque el Concordato de 1845 confiere al cabildo catedralicio de St. Gallen la capacidad de elegir al obispo, ningún candidato puede ser consagrado sin la confirmación explícita del Papa. Esta confirmación es un acto formal y libre de la Santa Sede, por lo que la responsabilidad final recae en quien aprueba la elección. En este caso, el papa Leo XIV.
REFERENCIA: Wailzer, A. (2025, May 23). Pope Leo XIV confirms priest who supports ‘women’s ordination’ as new bishop of St. Gallen, Switzerland. LifeSiteNews. https://www.lifesitenews.com/news/pope-leo-xiv-confirms-priest-who-supports-womens-ordination-as-new-bishop-of-st-gallen-switzerland/
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